El capitán de la selección Colombia de Baloncesto, Juan Diego Tello tercer Embajador de la Juventud Resiliente, descubre a jóvenes talentos en Barranquilla

 

El capitán de la Selección Colombia de baloncesto, Juan Diego Tello, compartió con cientos de jóvenes en el complejo deportivo ‘Pibe Valderrama’, en Barranquilla, tras ser convocado para ser el nuevo embajador del Programa Jóvenes Resilientes de USAID y ACDI/VOCA, un proyecto social de cooperación internacional que busca potenciar las oportunidades para las y los jóvenes de 30 municipios del país.

 

En su juventud, el deportista se ganó una beca en la Universidad de Louisville (Kentucky), Estados Unidos, gracias a su talento en el basquetbol. Cursó sus estudios y se graduó como periodista mientras se convertía en una estrella nacional e internacional en el balonmano. Logró destacarse en las ligas de España, Francia, Turquía y Lituania.

 

Por ser un referente de disciplina y persistencia, el Programa Jóvenes Resilientes de USAID y ACDI/VOCA convocó al deportista para ser uno de los embajadores de este proyecto, en el que ya se unieron el futbolista Juan Guillermo Cuadrado y el cantante Andrés Cepeda. “En USAID sabemos Juan que tu labor como Embajador de la Resiliencia Juvenil inspirará a muchos niños y jóvenes a empoderarse y convertirse en agentes de cambio en sus comunidades y territorios, así como a mantener proyectos de vida exitosos en la legalidad. Su vida personal y profesional es una clara muestra de lo que la juventud puede lograr siendo resiliente”, comentó Anupama Rajaraman, directora de USAID Colombia.

 

Juan Diego señaló que fueron dos los factores que le permitieron convertirse en el deportista que es hoy. “La persistencia es lo más importante. Cuando tenía 13 años ya jugaba en las ligas sub-17 y sub-18 y eso fue gracias a la disciplina. Todos y todas tenemos talento en algo, pero el talento no es suficiente; hay que trabajarlo con dedicación”, comenta el deportista.

 

El segundo factor que lo inspiró fue su familia. El deportista comentó que vio en el baloncesto una oportunidad para aportar económicamente en su hogar, y fue precisamente su madre, María Cevera Tello Palacios, quien lo apoyó en los momentos de más dificultad. “Fue ella quien decidió salir a buscarme oportunidades y por eso nos mudamos a Medellín, en donde me ayudó a valorar la disciplina por lo que uno se apasiona. Siempre estuvo presente aun cuando fui a estudiar y a competir a Estados Unidos”, dijo Tello.

 

Juan Diego busca talentos con su fundación “Encesta tus sueños”

 

Juan Tello no solo es un campeón deportivo, sino también humano. En 2015 creó los campamentos ‘Encesta tus sueños’, en los que, en sus diferentes versiones, ha apoyado a niños y jóvenes con acompañamiento deportivo, nutricional y psicológico, además de inspirarlos con presentaciones artísticas. “La idea es que encuentren sus pasiones y entiendan que pueden alcanzar sus sueños si son dedicados y disciplinados. El espacio es creado para jóvenes que quieran ser basquetbolistas, pero también para los que están interesados en otros oficios o profesiones”, explica Tello.

 

En su presentación como embajador del Programa Jóvenes Resilientes, el deportista compartió con jóvenes de Barranquilla detalles de su juventud en Quibdó, Medellín y posteriormente en Estados Unidos, enfatizando que es la persistencia la que se nutre del talento, “porque la llave es la dedicación. Podemos lograr lo que nos propongamos si sembramos disciplina en lo que amamos”. Finalmente, Tello dirigió una clínica de baloncesto en la que compartió con jóvenes recomendaciones para mejorar su técnica de juego.

 

El programa desea que otros “Juan Diego Tello” se generen en las canchas de los barrios en Barranquilla, Riohacha, Tibú o Tumaco. “Jóvenes Resilientes” está presente en 30 municipios del país para apoyar a los y las jóvenes en la construcción de sus planes de vida.

 

Sobre el Programa Jóvenes Resilientes

 

El Programa Jóvenes Resilientes es el primer programa de USAID Colombia dedicado a elevar el potencial de los y las jóvenes en 30 municipios del país, creando entornos protectores que habiliten el acceso a oportunidades económicas, de formación y de aprovechamiento del uso del tiempo libre. Lo anterior, generando puentes de conexión entre familias, comunidades y entidades públicas y privadas para que las juventudes tengan liderazgo y participación sociopolítica en pro de sus comunidades y territorios.