El Arte de hacer Popó Una digestión sana. Una vida feliz

  

La Dra. Juliana Suárez es una gastroenteróloga que ha logrado destacarse en las redes sociales, con 

489,980 seguidores en Instagram y 839,494 en TikTok, donde es conocida como la Dra. Popó. Este particular apodo le fue otorgado gracias a su diferente manerade hablar sobre un tema que puede hacer sonrojar a más de uno, pero que es parte fundamental de la vida humana. Con más de 11 años de experiencia en el sector de la salud, se posiciona como una de las profesionales más importantes en la especialidad de gastroenterología en Colombia.

A través de sus redes sociales, la Dra. Suárez comparte mensajes sobre lo que nuestro sistema digestivo nos comunica, de manera franca y directa, derribando mitos de la salud digestiva sin filtros. Su compromiso con cientos de pacientes ha transformado vidas, permitiéndoles disfrutar de una función intestinal óptima, restaurando el equilibrio de la microbiota intestinal (el complejo universo de microorganismos que habita en nuestro sistema digestivo) y eliminando restricciones alimentarias.

Gracias a las consultas que recibe diariamente tanto en su consultorio como en sus redes sociales, junto con su manager, Tatiana Zuluaga, hace unos meses decidieron crear el programa "Intestino Saludable", un innovador curso digital que tiene como objetivo impactar positivamente y cambiar vidas al desmitificar 

conceptos y resolver las incógnitas que rodean a la salud gastrointestinal. Este curso ha vendio más de 1.000 accesos en su semana de lanzamiento.

 Asimismo, la Dra. Suárez ofrece productos tangibles que ayudan a sus pacientes a mejorar su salud gastrointestinal, como el banquito para hacer popó, producto que utiliza en su curso donde le recomienda a los pacientes el uso del mismo, para mejorar el tránsito gastrointestinal, evitar y mejorar es estreñimiento y tener una óptima evacuación, sin lesiones ni dolor y una fibra que combate el estreñimiento y ayuda a mejorar la salud intestinal.

En su búsqueda continua por herramientas que mejoren la calidad de vida de las personas, decidió escribir su libro "El Arte de Hacer Popó”, el cual se lanzará el próximo 17 de octubre de 2024 en la Librería Dushi Books, donde explica ¿cómo cuidar el sistema digestivo y el microbiota intestinal?, ¿cómo reconocer rápidamente los síntomas y problemas digestivos?, qué se puede hacer para manejarlos, y cuándo se debe consultar al médico, este libro tendra un costo de $54.000 pesos colombianos y se podra adquirir a través de la página https:celebritiesstore.com.co/ en preventa desde el 25 de septiembre de 2024. 

El enfoque del libro es muy novedoso, pues aborda el tema sin tapujos y explica de una manera científica, clara y divulgativa las posibles razones de las molestias digestivas y lo que podemos hacer para sanarlas.

¿Sabes por qué el intestino es tan importante para la salud?

La relación entre nuestro sistema digestivo y la salud es mucho más importante de lo que muchos creen. Se dice que el intestino es “un segundo cerebro” y razones hay de sobra. El intestino contiene una red de más de 100 millones de neuronas, conocida como el sistema nervioso entérico. Aunque no es capaz de pensar como el cerebro, puede operar de manera autónoma y controlar funciones digestivas complejas. Asimismo, este órgano produce una gran cantidad de neurotransmisores, como la serotonina (hasta el 90% de la serotonina del cuerpo se genera en el intestino), que influyen en el estado de ánimo, el sueño y el bienestar general. Por otra parte, el intestino y el cerebro están conectados a 

través del nervio vago y otros caminos bioquímicos, permitiendo una comunicación bidireccional. Esto explica por qué el estrés o la ansiedad pueden afectar la digestión y viceversa.

Las bacterias que habitan en el intestino (microbiota) también influyen en la función cerebral, el sistema inmune y la salud mental. Se ha descubierto que un desequilibrio en la microbiota puede estar relacionado con trastornos como la depresión y la ansiedad.

Después de muchos estudios, se ha demostrado que la microbiota intestinal, antes conocida como “flora intestinal”, es, en gran medida, la responsable de nuestro bienestar. 

Es interesante saber que el 70% del sistema de defensa de un ser humano habita en el intestino.

Estos microorganismos son responsables, nada más y nada menos de regular funciones através de procesos como:

 Producir vitamina K, ácido fólico, vitamina B12, vitamina B5 y biotina: importantes para la salud de nuestras células, huesos, sangre y tejidos en general.

• Regular nuestro apetito, sueño, saciedad y la forma como almacenamos grasa. Hay estudios que indican que dos personas que con alimentación similar pueden tener composiciones corporales muy diferentes (delgadas u obesas) si su microbiota es diferente. 

• Tienen influencia sobre la salud hormonal femenina, pues producen una enzima que activa el estrógeno para que tenga su acción adecuada en el útero, en los ovarios y, en general, en todo el cuerpo. Y esto no solo compete a mujeres: la microbiota se 

comunica con el testículo, influyendo en su trabajo de producción de testosterona y de esperma, por ejemplo.

• Pueden modificar la expresión de nuestros genes, es decir, la capacidad de nuestros genes para transcribir información y producir proteínas.

Estos seres diminutos son increíbles, ¿verdad?

Es por esto que en su libro EL ARTE DE HACER POPÓ, la doctora nos explica cómo cuidar el sistema digestivo y el microbiota intestinal, cómo podemos reconocer rápidamente los síntomas y problemas digestivos, qué podemos hacer para manejarlos, y cuándo debemos 

consultar al médico. 

El enfoque del libro es muy novedoso, pues aborda este tema sin tapujos y explica de una manera científica, clara y divulgativa las posibles razones de las molestias digestivas y lo que podemos hacer para sanarlas.

¿Por qué debemos hablar del popó sin tapujos? La doctora Juliana lo explica

“A muchas y muchos se nos enseñó que defecar era algo sucio, que debíamos hacerlo sin que nadie se diera cuenta, que no debía sonar, que no debía oler, e incluso que si no defecábamos era mucho mejor. ¿Mirar o revisar la materia fecal? ¡Jamás! Levantarse, darse la vuelta y entre más rápido saliéramos volando de esa situación mejor, ¿verdad?

A otras y otros se nos enseñó que en el cuarto contiguo al baño no debía haber nadie en el momento de defecar o que debíamos esperar a que nuestra pareja estuviese en otro piso para defecar. Y luego eliminar cualquier rastro de aquel “hábito prohibido”.

También se nos enseñó que en los baños fuera de casa no se defecaba, no se apoyaban las nalgas, y que debíamos aguantar y aguantar hasta llegar a casa. Pedir un baño prestado en casa ajena se nos volvió casi un sacrilegio.

 Producir vitamina K, ácido fólico, vitamina B12, vitamina B5 y biotina: importantes para la salud de nuestras células, huesos, sangre y tejidos en general.

• Regular nuestro apetito, sueño, saciedad y la forma como almacenamos grasa. Hay estudios que indican que dos personas que con alimentación similar pueden tener composiciones corporales muy diferentes (delgadas u obesas) si su microbiota es diferente. 

• Tienen influencia sobre la salud hormonal femenina, pues producen una enzima que activa el estrógeno para que tenga su acción adecuada en el útero, en los ovarios y, en general, en todo el cuerpo. Y esto no solo compete a mujeres: la microbiota se comunica con el testículo, influyendo en su trabajo de producción de testosterona y de esperma, por ejemplo.

• Pueden modificar la expresión de nuestros genes, es decir, la capacidad de nuestros genes para transcribir información y producir proteínas.

Estos seres diminutos son increíbles, ¿verdad?

Es por esto que en su libro EL ARTE DE HACER POPÓ, la doctora nos explica cómo cuidar el sistema digestivo y el microbiota intestinal, cómo podemos reconocer rápidamente los síntomas y problemas digestivos, qué podemos hacer para manejarlos, y cuándo debemos 

consultar al médico. 

El enfoque del libro es muy novedoso, pues aborda este tema sin tapujos y explica de una manera científica, clara y divulgativa las posibles razones de las molestias digestivas y lo que podemos hacer para sanarlas.

¿Por qué debemos hablar del popó sin tapujos? La doctora Juliana lo explica

“A muchas y muchos se nos enseñó que defecar era algo sucio, que debíamos hacerlo sin que nadie se diera cuenta, que no debía sonar, que no debía oler, e incluso que si no 

defecábamos era mucho mejor. ¿Mirar o revisar la materia fecal? ¡Jamás! Levantarse, darse la vuelta y entre más rápido saliéramos volando de esa situación mejor, ¿verdad?

A otras y otros se nos enseñó que en el cuarto contiguo al baño no debía haber nadie en el momento de defecar o que debíamos esperar a que nuestra pareja estuviese en otro piso para defecar. Y luego eliminar cualquier rastro de aquel “hábito prohibido”.

También se nos enseñó que en los baños fuera de casa no se defecaba, no se apoyaban as nalgas, y que debíamos aguantar y aguantar hasta llegar a casa. Pedir un baño prestado en casa ajena se nos volvió casi un sacrilegio.